Es una especie única, y no solamente en San Juan, también en el país y en el continente. La palmera de dos brazos de Concepción es una rareza natural que despierta curiosidad y asombro. La primera pregunta que surge es si esta singular forma es producto de una intervención humana. Sin embargo, la respuesta sorprende: es una de las tres palmeras en el mundo con esta característica única.
Este árbol emblemático se alza en la intersección de las calles General Acha y Cereceto, en el barrio Concepción. Su historia se remonta a hace al menos 120 años, aunque no existen registros que identifiquen a la persona que plantó esta especie, originaria de la península de Baja California, México.
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La palmera posee un único tallo que, en algún momento de su crecimiento, experimentó una deformación en la yema, dividiéndose en dos brazos. Este fenómeno es extremadamente raro y, según expertos botánicos, las causas de estas anomalías siguen siendo un misterio.
El ejemplar se encuentra en un boulevard construido en 1890, donde originalmente había al menos 25 palmeras. Estas fueron removidas con la urbanización del área en el siglo XIX, pero la palmera de dos brazos fue la única que se conservó. La Municipalidad de la Capital se encarga actualmente de su mantenimiento, y los informes indican que está en perfecto estado, libre de enfermedades. Se estima que estas palmeras pueden vivir hasta 300 años.
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Además de la de San Juan, las otras dos palmeras de dos brazos documentadas están en Asia y Europa. Sin embargo, la Asociación Mundial de Botánicos no descarta que puedan existir otros ejemplares aún no descubiertos.
Aunque este árbol no está incluido en ningún circuito turístico oficial, es un punto de visita frecuente para turistas y biólogos de distintas partes del mundo. En su base, una placa describe las características de este ejemplar extraordinario.
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Los vecinos de Concepción han solicitado que se cerque el área donde se encuentra la palmera para garantizar su protección, ya que el árbol no cuenta con medidas de seguridad. Aunque no hay antecedentes de daños, consideran que sería prudente anticiparse a posibles actos vandálicos. Además, durante los últimos años pidieron que los transeúntes sean cuidadosos con la limpieza del lugar, ya que manifestaron que dejan basura por esa zona.