Un rayo de luz de la icónica farola revela cada detalle de la imponente arquitectura de la antigua Estación San Martín. Por más de un siglo, esta estructura ha iluminado uno de los sitios culturales más emblemáticos de San Juan. Según informaron, la farola arribó en 1910 para reemplazar la estatua de Fray Justo Santa María de Oro, trasladada posteriormente al Parque de Mayo. En un video, la historia de este rinconcito sanjuanino.
Embed - Rinconcitos Sanjuaninos: Farola Francesa
Fabricada por una empresa de fundición francesa, la misma que creó otras dos esculturas ubicadas sobre Avenida Libertador, hizo un diseño único que la convirtió en un símbolo fotográfico desde principios del siglo XX.
La farola llegó a San Juan en tren y requirió el esfuerzo de más de 100 hombres para ser trasladada desde las vías hasta su actual emplazamiento. Durante años, fue la única fuente de iluminación en el ingreso a la estación ferroviaria, hasta que paulatinamente se sumaron otras luces.
Aunque su estado parece óptimo, un accidente ocurrido hace casi 20 años alteró su apariencia. La caída provocada por un intenso viento sur dañó las tulipas, ahora reemplazadas por versiones resistentes al vandalismo, y modificó su base, actualmente reforzada con un tubo más robusto.
El incidente reveló que no solo el clima contribuyó al colapso, sino también el robo de tres de los cuatro tornillos de acero que la sujetaban. Con más de 3.000 kilos de hierro fundido, la farola sigue en pie, manteniendo su papel como telón de fondo para fotografías de varias generaciones.