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SUSCRIBITEEstaba a la cabeza de Anhelo Desarrollos y se vendía como una empresaria de las más jóvenes en el rubro de la construcción. Su pasado por la UNSJ y sus inicios como emprendedora inmobiliaria.
Denise Robles Bonade, una mujer de 31 años, está en el ojo de la tormenta luego de recibir varias denuncias por estafas. Familias sanjuaninas la acusan de haberse quedado con millones estafándolas con el sueño de la casa propia.
Desde la Justicia informaron a Tiempo de San Juan que las denuncias "son varias" y que también incluyen algunas por negocios financieros que serían fraudulentos. Mediante estos, Denise Robles Bonade habría ofrecido oportunidades de inversión a distintas personas que le daban dinero que ella prometía regresar a los tres meses y con intereses, pero esto no ocurrió.
En una entrevista que la misma Robles Bonade dio en el año 2020 se presentaba como una joven promesa de la Cámara de la Construcción Argentina. Fue para el programa radial "Desconocidas y No tanto", que salía al aire por Radio Light. La entrevista se realizó en agosto de ese mismo año y se presentó a Robles Bonade como una empresaria exitosa de tan solo 26 años que había iniciado su emprendimiento de la construcción "Anhelo Desarrollos", cuando tenía nada más que 23.
"Me encargo de dirigir una empresa constructora, un ámbito que anteriormente era solo de hombres. Lo disfruto mucho. Me gusta y trato de ir armando un equipo que sea versátil y sean rápidos. Manejo la construcción tradicional como hierro, cemento y ladrillos. Una tiene que tratar de brindar un buen servicio, ene l menor tiempo posible", aseguró en esa entrevista Robles Bonade.
Anhelo Desarrollos puso privada su cuenta de Instagram cuando salieron a la luz las denuncias de familias sanjuaninas que la escracharon por redes sociales y manifestaron nunca haber recibido su vivienda. El perfil de Facebook del emprendimiento directamente fue borrado.
Hoy, Robles Bonade tiene 31 años pero, según ella contó, uno de sus primeros antecedentes laborales fue en la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) donde estudiaba abogacía y se desempeñaba con una pasantía en el Consejo Directivo.
"Mi primer trabajo fue en la Facultad de Ciencias Sociales, en el Consejo Directivo junto a Lucero (actual decano) y ahí empecé a conocer el ámbito inmobiliario", afirmó.
Robles Bonade era una simple comisionista y recibía un dinero por las viviendas que vendía o alquilaba y fue entonces cuando descubrió su "pasión" por el mercado inmobiliario. Junto a un socio, llamado Rubén Martín, crearon Anhelo Desarrollos. También se supo que tiene un diario digital que se llama "En línea".
En la misma entrevista, las periodistas le comentaban que "la gente tiene miedo de que los que venden casas sean unos chantas". Muy segura, Robles Bonade respondía que como estudiante de abogacía trataba de "siempre generar una confianza en el marco legal de todas las operaciones que realizamos". "Es cierto que hay muchos estafadores. A mí me gusta demostrar con hechos, con entrega de llaves", dijo. De hecho, muchas de estas entregas estaban subidas a las redes sociales de Anhelo desarrollos, donde mostraban a sus "clientes satisfechos".
Fue justamente esa confianza que generó la empresaria la que llevó a que muchas familias decidieran gastar todos sus ahorros para que Anhelo les construyera su vivienda. Inclusive, hubo quienes también arriesgaron dinero con la mujer en inversiones financieras que ella habría prometido devolver con el 15% de intereses, tres meses después de la inversión inicial, pero esto tampoco ocurrió.
El paso de Robles Bonade por la UNSJ, fue una pasantía que duró apenas un año porque cuando comenzó a dedicarse al rubro de la construcción de barrios, decidió renunciar para apostar a su emprendimiento.
"Fue un desafío porque yo tenía un sueldo fijo. Me la jugué. Uno por ahí se la tiene que jugar", recomendó Robles Bonade en esa entrevista radial.
Por ahora hay total hermetismo de la Justicia sanjuanina con respecto a la causa contra la joven empresaria pero sí afirmaron que hay varias denuncias. Una de las familias víctimas, la acusa de haberse quedado con 37 millones de pesos.