La situación se repite de modo cíclico históricamente. Durante los años en que las lluvias son escasas, el Dique San Agustín de Valle Fértil sufre los embates del fenómeno, que se hace evidente con un parama desolador: la aparición de peces muertos en sus orillas. Estos casos se incrementaron en los últimos años debido a la extensa sequía que afecta a la zona. Sin embargo, esta vez, la Secretaría de Ambiente había puesto en práctica distintas medidas con el fin de mitigar el impacto de la falta de agua. Pero a eso se sumó ahora un factor que a esta altura parece milagroso, las lluvias que cayeron en el departamento desde finales de diciembre hasta enero pasados. Con ellas, los especialistas observaron un incremento en la cota del embalse y ya analizan su influencia.
El dique vallisto, a diferencia del resto de las represas de la provincia, se nutre de agua de lluvia. Como consecuencia, en las épocas en las que no hay precipitaciones su caudal baja y es ahí cuando se produce el combo que afecta a los peces. En varias oportunidades, los especialistas han explicado que, al haber poca circulación y cantidad de agua, su temperatura se eleva, el embalse pierde profundidad, se junta greda y se comienza a generar una superpoblación de algas. Todo esto, contribuye a que disminuya la cantidad de oxígeno en el agua y, como consecuencia, mueren los peces.
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La última vez que se registró la muerte de peces en el Dique San Agustín fue en febrero de 2024 (Imagen de archivo).
En los últimos años, el fenómeno se acrecentó, debido a que el proceso de sequía se hizo demasiado extenso. De hecho, hace casi 6 años, en 2019, la Municipalidad sacó una ordenanza para declarar la emergencia hídrica y agropecuaria en departamento y esa normativa sigue vigente.
Como consecuencia, la última vez que se registró la mortandad de peces fue en febrero de 2024, cuando los vecinos se vieron alertados por la situación y la Secretaría de Ambiente realizó un relevamiento en el espejo de agua y decidió colocar una autobomba para que circulara. Esto ya había ocurrido alrededor de la misma época en 2023 y también a finales de 2022. Pero incluso hay registros periodísticos sobre la aparición de peces muertos en el dique durante otras épocas de sequía como, por ejemplo, en 2012.
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El embalse vallista tras el ingreso de agua después de las primeras lluvias. Foto: Info Valle Fértil.
En esta temporada, el dique “realmente se encontraba en una situación de sequía bastante grave nuevamente”, comentó a Tiempo de San Juan Ezequiel Salomón, director de Conservación de la Secretaría de Ambiente. Y celebró que, “las últimas lluvias han contribuido bastante al mejoramiento en cuanto al nivel de agua del dique, han aliviado un poco la situación en general. Y no solamente en el dique San Agustín, sino en todas las cuencas naturales del departamento, más allá de que la situación de crisis hídrica se mantiene”.
El Dique San Agustín está habitado por peces de especies nativas y pejerreyes. Estos últimos son exóticos, es decir, no pertenecen al lugar, sino que son sembrados por su importancia turística y deportiva.
Amén de eso, para mitigar esta situación de la sequía en el embalse, desde la Secretaría de Ambiente ya venían tomado medidas. Por un lado, se había decidido liberar la veda de pesca, algo inédito en la provincia. Al respecto, Salomón detalló que, “si bien en esta época ya está habilitada la pesca deportiva en los embalses y ríos de la provincia, -debido a que se levanta normalmente entre el 15 de agosto y el 30 de noviembre-, la situación del Dique San Agustín es distinta, allí no va a haber periodo de veda por el transcurso de dos años. La medida comenzó a regir en octubre del año pasado y se extenderá hasta octubre de 2026”.
Cabe destacar que, según el funcionario, la veda sirve para permitirle al pez completar su ciclo biológico con fines reproductivos. Por eso, al sacarla, buscan bajar la población de peces. Es que, las poblaciones muy abundantes o sobrepoblaciones contribuyen a disminuir más todavía el oxígeno en el agua.
Por otro lado, en diciembre pasado se instaló una balsa en la represa que permite mejorar su oxigenación. “Se trata de un dispositivo novedoso desde el punto de vista de la tecnología. Es una balsa que está equipada con un motor alimentado por paneles solares, o sea que es totalmente sustentable y autónomo. Lo que hace es recircular una cierta cantidad de agua para poder, de esa manera, oxigenarlo”, indicó Salomón.
Al tiempo que amplió: “Es un sistema que se está empleando, por ejemplo, en los sectores productivo y agrícolas para poder mantener algunas represas con buenas condiciones de oxígeno y evitar la proliferación de algunas algas y cianobacterias. Y es que, hay muchos microrganismos de este tipo que son anaeróbicos, significa que se reproducen y viven sin oxígeno. Entonces, la falta de oxígeno favorece a su propagación y terminan contaminando el agua, generando más mortandad de peces”.
La esperanza y el análisis
Después de las lluvias y con las medidas en funcionamiento, los especialistas estiman que la situación en el embalse mejoró. Para corroborarlo, esta semana realizaron un análisis de su estado.
“Técnicos del Parque de la Biodiversidad, perteneciente a la Secretaría de Ambiente, viajaron a realizar estudios en el dique. Realizaron monitoreos de parámetros físico-químicos, como oxígeno disuelto, conductividad, pH, y además están tomando muestras de peces, de su abundancia y de fitoplancton. Esos datos van a ser procesados para poder obtener índices de diversidad y toda la información necesaria para saber en qué condiciones se encuentra el dique, su ecosistema y toda su biota. También se monitorean otras cuencas hidrográficas del departamento, como por ejemplo la del Río La Majadita, el de Los Bretes, para conocer en qué condiciones ecológicas se encuentran”, contó Salomón.
Y agregó: “A estos estudios los hicimos justamente antes de las lluvias y de implementar las medidas. Entonces, cuando tengamos los datos procesados, nos ayudarán a saber cómo evoluciona el embalse, cómo ha contribuido la lluvia y todo el arrastre de agua que ha habido y qué medidas tomar posteriormente. Si bien aún no tenemos detalles sobre la cota -a ese dato lo tendrán la semana que viene- sí es evidente que ha habido un aumento considerable, afortunadamente”.