La Catedral de San Juan se encuentra en plena etapa de remodelación con el objetivo de corregir algunos aspectos urgentes y mejorar las condiciones del emblemático templo. Este espacio religioso, ubicado en el corazón de la capital sanjuanina, es un punto de referencia tanto para los fieles católicos como para los turistas que la visitan cada año.
El padre Andrés Riveros, a cargo del templo, explicó que ya se ha avanzado casi un 40% en la primera etapa de las obras, que incluyen la construcción de diez nuevos sanitarios. Este trabajo resulta clave para atender la creciente demanda de servicios debido a la constante llegada de contingentes turísticos y grupos parroquiales, así como la Escuela de Ministerios de San Juan, que funciona por las noches.
"Hoy, solo en la mañana, ya recibimos cuatro contingentes que requirieron el uso de baños. El pequeño sanitario de personal colapsaba casi a diario", señaló el padre Riveros a diario La Provincia. En esta primera fase también se contempla la incorporación de un baño adaptado para personas con discapacidad, subrayando el compromiso de la Catedral con la inclusión.
Además de los sanitarios, se planifica una segunda etapa enfocada en la refacción general del templo. Esta incluirá mejoras en el piso, ornamentos, seguridad e iluminación, con el fin de renovar tanto el interior como el exterior del edificio. "Estamos muy cerca de comenzar estas nuevas obras que le darán un aspecto completamente renovado a la Catedral", agregó el padre Riveros.
Para financiar estos trabajos, la administración de la Catedral ha lanzado un Bono Contribución, invitando a la comunidad a colaborar con la causa. El bono, que tiene un costo de 5.000 pesos, ofrece como primer premio un terreno donado por un gremio, además de otros premios en efectivo. La iniciativa ha captado el interés no solo de fieles católicos, sino también de personas de otras creencias que desean apoyar el proyecto de remodelación.