Como si fuera una especie de cupido 2025, en plena era digital, donde los mensajes instantáneos y los emojis dominan la comunicación, Luis Ortega, un sanjuanino de 22 años, decidió poner en marcha un curioso emprendimiento. Él rescata el arte de la escritura a mano para avivar la llama del amor. Con una lapicera y un papel como aliados, el estudiante de Arquitectura se dedica a redactar cartas de amor personalizadas a pedido, diseñadas para conquistar corazones y fortalecer vínculos sentimentales y a venderlas a través de las redes sociales.
"Hay personas que tienen mucho que decir, pero no saben cómo expresarlo. Otros, simplemente, no se sienten cómodos escribiendo. Entonces, yo les consulto sobre sus sentimientos e ideas a transmitir y les permito llegar a sus personas queridas a través de mis textos", comenta el autor de las misivas.
El servicio que ofrece este sanjuanino es tan variado como las historias de amor que lo inspiran. Desde cartas apasionadas para aniversarios hasta mensajes sutiles para declarar un amor naciente, Luis escribe cada texto adaptándose a las necesidades y personalidades de sus clientes.
"Tengo la publicación en Marketplace y me escriben a través de ella. Cuando se comunican, me explican lo que necesitan y los les pregunto, más que nada, ¿a quién se la quieren dirigir?, ¿qué es lo que quieren transmitir? Y más que nada, ¿cuál es la situación por la cual la van a regalar? Así descubro si es una propuesta de novia o de novio, si es por un aniversario, por un casamiento, por cualquier situación puntual o algo que quieran conmemorar de una relación, porque también pueden ser para un amigo, una amiga. Entonces, con estos datos, puedo hacer algo personalizado, que permita llegar a la otra persona a través de la escritura", explica el joven que vive en Capital junto a sus padres y su novia.
Entre la habilidad y la necesidad, el nacimiento del emprendimiento de Luis
La idea de este peculiar negocio surgió durante estas vacaciones. Mientras Luis tenía tiempo libre surgió la necesidad de empezar a comprar los materiales para el nuevo año de cursado de su carrera.
"Más que nada empecé porque estaba en vacaciones, necesitaba dinero para empezar a comprar los materiales para la facultad y venía el 14 de febrero. En mis tiempos libres yo leo mucho y escribo, tengo la capacidad para escribir, y bueno, aproveché para escribirle cartas a mi novia, Florencia. Fue en medio de eso que dije, ‘bueno, ¿por qué no escribirlas para otras personas?’. Así que, ella también me inspiró y me dio en parte la idea de brindar este servicio que, por lo que estuvimos viendo, nadie más ofrece", relata Luis, quien ya es dueño de otro emprendimiento llamado Luisen, a través del cual diseña, cose y vende bolsos artesanales junto a su familia.
Ahora a modo de balance sobre su nuevo trabajo, el sanjuanino afirma que, aunque el negocio de las cartas de amor es relativamente nuevo, la respuesta del público ha sido muy positiva. “He recibido consultas de muchísimas personas, porque les parece algo novedoso. Y, por otra parte, muchas de ellas me han encargado sus cartas. La mayoría son hombres y, principalmente, jóvenes”, revela.
Y cuenta que, dentro de sus propuestas, ofrece dos opciones a sus clientes: la carta escrita a mano o el texto digital. "Yo escribo y la persona puede entregar la carta en papel ya escrita o si no, darles el escrito virtual y ellos le ponen su letra para que sea más personal, para que no parezca que lo hizo otra persona", explica.
Historias que inspiran
Entre las numerosas historias que ha tenido la oportunidad de escribir, Luis recuerda con especial cariño. La de un joven que le pidió ayuda para proponerle noviazgo a la chica que le gustaba. "Un chico me contó que su intención era proponer ser el novio a una chica. Escribí la carta, él se la entregó y, finalmente, después me contó que tuvo éxito. Fue lindo para mí haber podido participar en la unión de dos personas a través de la escritura", comenta entusiasmado.
Pero, en su opinión, ¿se ha perdido el romanticismo? "Sí, a veces con tanto uso de la tecnología es como que uno ya no escribe, ya no se expresa tanto en el papel y sí por mensaje. A uno le cuesta más armar textos largos y expresarse también abiertamente. Utilizamos casi siempre las mismas palabras y nuestro léxico está muy acotado últimamente. Más que nada por eso, por la mensajería", reflexiona.
Las cartas de Luis tienen un precio inicial de dos mil pesos, aunque el costo puede variar dependiendo de las necesidades del cliente. "Las estoy cobrando a partir de los dos mil pesos. Ya después el precio varía dependiendo de qué me pide el cliente. Sí es sólo texto ese es el precio. Ya si quieren una carta con algún diseño, con un sobre especial puedo cobrarlas a tres mil o cuatro mil pesos", explica Luis y dice que quienes quieran su servicio pueden comunicarse al número 264-6046626. Para finalizar, asegura la confidencialidad y que nunca guarda los textos que escribe para terceros. "Se trata de mensajes privados que pertenecen a otras personas. Yo solamente le doy la oportunidad que se pueda expresar y listo", afirma.
Embed - El sanjuanino que vende cartas de amor para que otros conquisten a sus parejas