Otro hecho de violencia vuelve a ensuciar el fútbol sanjuanino. Se jugaba Alianza-Picón, en el duelo correspondiente de la fecha 14, cuando de un momento todo se descarriló. Román Páez fue agredido por el utilero de Picón, cuando estaba a punto de ser reemplazado por otro compañero. En su salida, Fernando Ácalos, quien cumplía funciones como utilero y ayudante de campo del equipo local, lo increpó y lo dejó inconsciente de una trompada.
"En el segundo tiempo vino un hombre y me pegó una piña, traigo el piso y pierdo el conocimiento", comenzó relatando el jugador lechuzo a Telesol Diario. Asimismo, dijo que después de estar más de 20 minutos inconsciente a causa del fuerte golpe, recién pudo despertarse en la ambulancia, cuando se encontraba a metros del hospital departamental.
Ante esta situación violenta y por la que Ávalos estuvo un día entero detenido, aseguró: "Fue un momento desagradable, la pasé mal, Pero gracias a Dios estoy bien. Fue una desgracia con suerte".
Por último, el mediocampista de 20 años agradeció la atención de los médicos y las personas que se preocuparon por él.