El Gobierno habilitará en las próximas semanas la posibilidad de que los consumidores puedan autodespacharse combustible en las estaciones de servicio, tal como sucede en Estados Unidos o algunos países de Europa. Ese sistema fue aplicado este año en algunas estaciones de Rosario, tras el asesinato de un playero en lo que fue un presunto crimen narco. La intención oficial es además contemplar la carga de electricidad para no dejar afuera a los vehículos eléctricos.
La medida fue anticipada este martes por Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, durante su participación en la última edición del año que tendrá el tradicional almuerzo que reúne a los principales empresarios del Club del Petróleo en el Hotel Libertador. El funcionario tuvo pasado como economista jefe en YPF entre 1995 y 1998, cuando la ahora empresa estatal se encontraba en manos privadas.
Sturzenegger además prometió que la gestión del presidente Javier Milei “acelerará la motosierra” - en referencia al ajuste del gasto -, prometió continuar con desregulaciones y anticipó otras medidas para el sector energético. El funcionario evitó dar definiciones sobre temas más sensibles para el sector, como la reciente reglamentación de la Ley de Hidrocarburos cuya redacción dejó con sabor a poco a algunos miembros de la industria del oil & gas por la posibilidad de cierta “discrecionalidad” para interrumpir exportaciones.
El funcionario afirmó que la iniciativa que puede plantear un fuerte cambio en el funcionamiento de las estaciones de servicio del país será oficializada en las próximas dos semanas a través de un decreto. La punta de lanza de ese proceso deberá ser la petrolera estatal YPF, principal jugadora del mercado local con unas 1.600 estaciones y casi el 60% del volumen de despachos.
“¿Por qué vamos a tener una ley que te dice que no podés generar autodespacho de combustible? En Argentina, por un tema de necesidad extrema, YPF lo ha implementado en Rosario pero no tendría que ser por un tema de seguridad, es un tema de libertad, vos organizá tu relación comercial de la manera más libre que quieras”, sintetizó el ministro respecto al espíritu que persigue el Gobierno.
Sturzenegger comentó que había discusiones sobre los tamaños que debían tener las estaciones de servicio o lo que sucedería con los camiones, pero dijo: “Nosotros queríamos liberar totalmente las restricciones de tamaño, no recuerdo cómo quedó, pero el decreto está escrito y está en proceso para el autoabastecimiento”.
El ministro desregulador resaltó que la norma contemplará también el autoabastecimiento de electricidad para generar un espacio de total libertad y que no se forme un nicho de negocios particulares. “Cuando vos tengas autos eléctricos, vas a ir a un restaurante y vas a querer cargar el auto, cuando estás comiendo en el restaurante, o si vas a un shopping, vas a querer cargar el auto cuando estés comprando en el shopping”, sostuvo.
Por otro lado, Sturzenegger adelantó que también tiene en carpeta derogar antes de fin de año una norma que indica el método de limpieza en los tanques de almacenamiento de petróleo y cada cuánto debía llevarse a cabo ese proceso. “¿A quién está protegiendo esa regulación? ¿A Doña Rosa? Si acá estamos hablando de dos adultos, dos empresas que se ofrecen quizás el servicio de tancaje”, señaló.
Lo mismo espera hacer para las importaciones de bienes de capital usados, en la que se eliminará antes de fin de año el requisito de Certificado de bienes usados. “Imagínense lo que puede hacer la industria metalmecánica de Santa Fe con las máquinas que hay en Italia que tienen uno o dos años de uso. Se podrían comprar para hacer una revolución industrial en Argentina y, sin embargo, no se animan a comprarla porque después no saben si en la Aduana se la van a permitir pasar o no”, mencionó el ministro.
Sturzenegger dejó un mensaje claro a los empresarios que participaron del almuerzo: la motosierra va acelerar para profundizar el ajuste fiscal y “quedan 217 días” de facultades delegadas por el Congreso para avanzar en desregulaciones. Lo escuchaban atentamente Horacio Marín (YPF), Catherine Remy (Total), Ernesto López Amazon (IAPG), Oscar Sardi (TGS), Carlos Ormaechea (CEPH) y Tomás Hess (CEOPE), sentados en la mesa principal y unos 200 invitados repartidos a lo largo del salón. Se notó el faltazo de otros popes de la industria local.
En la mesa principal se sentó también el ex secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, quien dejó su cargo hace poco más de un mes. La figura de Chirillo fue resaltada en varias oportunidades por Sturzenegger como un coautor del DNU 70/2023 y la primera versión de la Ley Bases. Ambas normas son levantadas por Milei como parte del proceso desregulador “más importante de la historia” argentina.
Los hombres de negocios tienen en claro el compromiso del Presidente y su equipo, que tiene como una de las principales figuras de “la motosierra” a Sturzenegger.
En ese sentido, cuando el ministro terminó de hablar frente a los referentes de la industria, Fernando Fernández, CEO de Netzsch, le regaló un cuchillo como presente por su participación en el Club del Petróleo. El empresario rápidamente recordó frente a los presentes la tradición de que quien recibe un cuchillo como regalo debe dar una moneda a cambio, para evitarle a quien hizo el obsequio la responsabilidad sobre lo que se haga con la potencial arma blanca.
“Tengo la apuesta de ver si te puedo sacar una moneda. Me dijeron que eso es lo más jodido”, dijo Fernández entre las risas de los presentes. Sturzenegger no tenía efectivo encima pero igualmente se llevó el cuchillo.