Una estudiante universitaria de diseño realizará trabajos comunitarios y pagará una suma de dinero para frenar el proceso penal en su contra por haber hurtado las tarjetas de crédito del abuelo de su amiga y hacer compras por más de 250 mil pesos. La chica se dio el gusto de comprar comida, mercadería, bebidas alcohólicas y ropa.
Candela Luciana Luna, de 20 años, fue denunciada en diciembre último en la UFI Delitos contra la Propiedad por la familia de una amiga suya. Esa otra muchacha tenía mucha confianza con ella y la invitaba a su casa en Capital, donde también vive su abuelo. Esto fue durante el 2024. En una de esas ocasiones, según la exposición de la fiscalía, la estudiante de diseño sustrajo las tarjetas de crédito de la billetera del anciano.
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El defensor oficial César Oro (a la izquierda) y el equipo de la UFI Delitos contra la Propiedad.
El hombre mayor se enteró de esto en diciembre pasado, cuando recibió una comunicación de la sucursal de un supermercado del centro sanjuanino en la que le avisaron que estaban efectuando compras con sus tarjetas crédito. Ahí descubrió que no tenía los plásticos. Después le empezaron a llegar los comprobantes de las compras de una campera en Prune, de bebidas y mercaderías en un supermercado y hasta varios pedidos de comida a través de Pedido Ya. Los damnificados aseguraron que la muchacha gastó más de 250 mil pesos en nombre del abuelo.
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La suspensión de juicio a prueba fue concedida por el juez de garantías Juan Gabriel Meglioli.
Luna fue denunciada y le imputaron el delito de hurto, pero no fue detenida. En la audiencia de este martes, el defensor oficial César Oro y el fiscal Cristian Gerarduzzi y sus ayudantes fiscales de la UFI informaron al juez Juan Gabriel Meglioli que habían llegado a un acuerdo para la suspensión de juicio a prueba. Fue así que la joven se comprometió a pagar tres cuotas de 36 mil pesos a modo de resarcimiento en favor al abuelo de su examiga y realizar labores comunitarias gratuitas en la municipalidad de Rivadavia durante 25 horas en el plazo de 3 meses. El magistrado dio su visto bueno y finalmente le concedió la probation.