Un hecho insólito y desagradable conmocionó a los trabajadores de la Iglesia Catedral este jueves por la tarde. Cerca de las 19, un hombre ingresó al templo, defecó y dañó una alcancía que contenía donaciones de los fieles.
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SUSCRIBITEEl sujeto ingresó y salió rápidamente. Una empleada de la Secretaría pidió auxilio a la Policía.
Un hecho insólito y desagradable conmocionó a los trabajadores de la Iglesia Catedral este jueves por la tarde. Cerca de las 19, un hombre ingresó al templo, defecó y dañó una alcancía que contenía donaciones de los fieles.
La profanación salió a la luz cuando una mujer policía, cabo primera de guardia en la zona de Mendoza y Rivadavia, recibió un pedido de auxilio. Una trabajadora de 42 años, que desempeña funciones en la Secretaría de la Catedral, le informó que, a través de las cámaras de seguridad del templo, habían detectado a un hombre con una actitud sospechosa dentro del recinto.
Al revisar el lugar, los empleados encontraron materia fecal y advirtieron que una alcancía portátil había sido violentada. En el suelo yacían billetes arrugados, pertenecientes a las donaciones realizadas por los fieles. Según los testigos, el hombre habría ingresado y salido rápidamente por la calle Rivadavia.
La Policía actuó de inmediato tras la denuncia, y el ayudante fiscal en turno ordenó que se realizara una inspección ocular en el templo. Además, se instruyó la revisión de las cámaras de seguridad y la recopilación de todas las pruebas pertinentes, las cuales serán remitidas a la UFI de Delitos contra la Propiedad para continuar con la investigación.
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