Una comerciante de Chimbas quedó en ruina por ataque delictivo que le costó alrededor de 10 millones de pesos. Ladrones entraron en la madrugada de este martes en su tienda, que abrió hace una semana, y robaron desde ropa interior hasta pantalones y camisas. También se llevaron artefactos y hasta cinco maniquíes.
Tan angustiada y resignada estaba Andrea Castro, la comerciante damnificada, que este mismo martes decidió cerrar su negocio y marcharse del local que alquilaba sobre la calle Chubut, en el barrio Levenson. El local comercial era tan nuevo que ni nombre tenía, si lo había abierto el lunes de la semana pasada después mucho esfuerzo para reunir la mercadería y algo dinero para empezar.
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Los ladrones dejaron prácticamente vacío al local comercial.
La comerciante contó que apostaron a este emprendimiento porque la dueña de los lotes construyó salones destinados a locales comerciales, además está a metros del Parque de Chimbas, que es muy concurrido. "Hace años que vendo ropa y esta era una oportunidad para tener mi propio negocio después de ahorrar mucho tiempo", explicó Castro.
De acuerdo a su relato, el lunes trabajaron hasta las 21 y cerraron el local con total normalidad. Este martes, cuando regresaron a abrir el negocio, se encontraron con la puerta principal estaba violentada y abierta. Adentro sólo había desorden y se encontraba prácticamente vacío.
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El local es una construcción nueva. Hace una semana que el negocio abrió al público.
"Me robaron de todo, o mejor dicho todo. Se llevaron toda la mercadería", aseguró. Los ladrones sustrajeron ropa interior y prendas de todo tipo para niños y adultos, dijo al punto de quebrarse. También robaron dos caloventores, la caja registrada y cinco maniquíes. La pérdidas ascienden a los 10 millones de pesos, denunció.
El robo la dejó shockeada, pero también la ruina. "Ahora estoy sacando todo, me voy de acá. No quiero saber nada", expresó indignada. Mientras tanto los policías de la Comisaría 17ma y de Robos y Hurtos de la Brigada de Investigaciones trabajaban bajo las órdenes del ayudante fiscal Juan Manuel García Castrillón y el fiscal Juan Manuel Gálvez, con la colaboración de Claudia Vila, de la UFI Delitos contra la Propiedad.