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SUSCRIBITEEl próximo 5 de marzo habrá una audiencia clave en la Justicia. Un nuevo tribunal de Impugnación tomará las riendas de la causa. El todavía sacerdote se encuentra en la cárcel cumpliendo la pena.
El cura Walter Bustos
Este miércoles 5 de marzo de se desarrollará una audiencia importante en el caso del cura Walter Bustos. La condena de 10 años impuesta por el tribunal de Impugnación compuesto por Silvina Rosso de Balanza (presidenta) y los vocales, Benedicto Correa y Martín Heredia Zaldo; será revisada por otro tribunal colegiado.
Estos nuevos jueces ya fueron seleccionados, los que estarán en esta audiencia crucial serán Maximiliano Blejman (presidente) y los vocales Ana Lía Larrea y Renato Roca, expresaron fuentes judiciales a este diario. Los mismos tomarán conocimiento de la causa y los fundamentos de cada parte, precisamente, fiscalía y defensa.
En este caso en particular se realizará la “revisión horizontal”, que en palabras concretas refiere a la facultad del imputado, condenado en un proceso penal, de poner en marcha una instancia de revisión de un fallo dictado por un tribunal. En la causa de Walter Bustos, precisamente, los jueces de juicio lo absolvieron y el Tribunal de Impugnación lo condenó. Se hará esta revisión para garantizar al derecho al doble conforme.
El tribunal de juicio compuesto por Federico Rodríguez, Celia Maldonado de Álvarez y Carolina Parra, el 15 de abril de 2024, absolvieron por el beneficio de la duda a Bustos en un fallo dividido. Seis meses después, precisamente el 8 de octubre, el tribunal de impugnación combinado por Silvina Rosso de Balanza (presidenta) y los vocales, Benedicto Correa y Martín Heredia Zaldo (también en fallo dividido) condenaban al sacerdote a 10 años de prisión efectiva por el delito de abuso sexual por aprovechamiento de la inexperiencia y/o la inmadurez de la víctima, agravado por ser cometido por un ministro de culto reconocido, dos hechos en concurso real, y en concurso ideal con corrupción de menores.
Este recurso de la revisión horizontal fue presentado por el abogado de Bustos, Joaquín Moine. Mientras que el representando al Ministerio Púbico Fiscal, el doctor Fabrizio Medici fue el que respondió los agravios.
Un 15 de abril de 2024 Walter Bustos sonreía a la salida de la sala de audiencia luego de conocer la noticia que había sido absuelto por el beneficio de la duda. “No soy un pervertido, ni ningún abusador. No se lo deseo a nadie”, dijo a los medios presentes.
A los pocos días de esta absolución (nueve precisamente), la Corte de Justicia sanjuanina daba a conocer que ratificaban la primera condena que había sido impuesta contra él. Su pena de 1 año y 8 meses pasó a ser de 3 años de prisión condicional porque lo consideraron culpable del delito de abuso sexual agravado por ser ministro de culto.
A los días se daba a conocer otra situación insólita. Otra denuncia caía a UFI CAVIG contra él. Lo acusaron de haberse comunicado con el entorno de la primera víctima por teléfono. El caso se investigó, se confirmó que sí se comunicó pero la denuncia fue desestimada.
Pero esa “paz” se acabó para Bustos el 8 de octubre. El tribunal de impugnación daba vuelta el fallo y lo condenaba a 10 años de prisión por el delito de abuso sexual por aprovechamiento de la inexperiencia y/o la inmadurez de la víctima, agravado por ser cometido por un ministro de culto reconocido, dos hechos en concurso real, y en concurso ideal con corrupción de menores.
Minutos después de las 13 horas se leyó ese dictamen y, conmocionado por lo sucedido, el cura Bustos se abrazó con su familia y se dirigió a la alcaidía esposado.