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SUSCRIBITEEs un tal Nicolás Alé, quien en 2021 cayó preso por maniobras fraudulentas similares. Este viernes fue imputado por dos nuevas estafas con la venta de lotes.
Este es Nicolás Alé, quien ya estuvo preso en 2021.
Un presunto estafador que cayó preso en 2021 acusado de embaucar a dos ancianos con dos lotes, vuelve a estar en la mira de la Justicia y de nuevo por estafas con terrenos. Dos familias denunciaron que este sujeto les vendió dos parcelas que ya tenían dueños y se quedó con una jugosa suma de dinero.
El imputado es el supuesto corredor inmobiliario Nicolás Alé y su pareja, Ana Paula Figueroa, quien habría actuado de cómplice. El ayudante fiscal Federico Pereyra y el fiscal Eduardo Gallastegui, de la UFI Delitos Informáticos y Estafas, le atribuyen dos maniobras fraudulentas en perjuicio de dos familias de apellidos Alcucero y Mallea.
Los representantes del Ministerio Público Fiscal pidieron este viernes la prisión preventiva contra Alé, pero el juez de garantías Alberto Caballero no hizo al lugar. En cambio, dispuso la inhibición de todos los bienes del supuesto corredor inmobiliario y su pareja, domiciliados en Rivadavia.
De acuerdo a la imputación, Alé y la mujer vendieron a esas dos familias dos lotes ubicados en la zona de Rivadavia a un precio de 800 mil y 750 mil pesos, respectivamente. Eso fue en 2021. En aquel entonces era mucha plata, hoy esos terrenos están valuados en cerca de 30 millones, graficaron.
Como en el caso que estalló la semana pasada por la megaestafa que involucra a tres empresarios sanjuaninos, Alé comercializó esas propiedades sin contar con documentación legal. Peor aún, uno de los terrenos que se le adjudicaba a una persona, estaba a nombre de un tercero que desconocía de la operación. El otro terreno, en cambio, figuraba con una nomenclatura catastral inexistente y tenía dueño, señalaron las fuentes.
Los damnificados le reclamaron a Alé y a la mujer, pero estos siempre les respondieron con evasivas y excusas, hasta que después no pudieron ocultar que se trataba de una estafa. Por eso mismo ambos fueron denunciados en mayo pasado en la UFI Delitos Informáticos y Estafas.
Alé y su mujer o expareja continuará en libertad, pero le prohibieron acercarse y contactar a los denunciantes y además no podrán vender ni disponer de sus bienes hasta que la Justicia resuelva.
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