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SUSCRIBITEEs Alfredo Rogelio Sosa. En abril del 2024 lo condenaron por estafas, en diciembre último lo castigaron por un asalto a mano armada y ahora recibió otra pena por dos estafas.
El ahora condenado Alfredo Rogelio Clemente Sosa Robledo.
En menos de un año, un hombre de Chimbas pasó de ser chofer de micros y camiones a un delincuente reincidente. En abril del año pasado lo condenaron por estafador y en diciembre lo volvieron castigar por asaltante. Y como no hay dos sin tres, ahora recibió otra pena por dos nuevas maniobras fraudulentas mediante un juicio abreviado.
El delincuente reincidente es Alfredo Rogelio Clemente Sosa Robledo, de 45 años. El sujeto, actualmente preso en el penal de Chimbas, fue llevado este lunes a Tribunales para responder por dos nuevos delitos de estafas cometidas durante 2024, que se acumularon a las causas penales que afrontó anteriormente y por las cuales lo condenaron.
Sosa Robledo es el hombre que en abril del año pasado fue condenado 6 meses de prisión, de cumplimiento condicional, por cometer una estafa con el DNI de otra persona. Es que en febrero del 2024 supuestamente encontró el documento de un tal Riveros y después se fue a un negocio de Albardón, donde sacó un crédito y compró dos celulares y un aire acondicionado. Había intentado sin éxito concretar la misma maniobra en otros comercios.
La pena fue en suspenso y Sosa Robledo recuperó la libertad, pero meses después volvió a caer preso. En 3 noviembre de 2024 lo atraparon tras cometer un robo a mano armada en un hotel alojamiento y en diciembre del mismo año fue condenado a 3 años de prisión de cumplimiento efectivo. Esa pena luego se le computó con la anterior y le quedó un castigo único de 3 años y 4 meses de prisión efectiva.
Los problemas para Alfredo Rogelio Sosa Robledo no terminaron ahí porque en el medio apareció otra causa penal en su contra por otras dos estafas cometidas a comienzo de 2024. Esos hechos se denunciaron en junio último. Todo surgió porque el tal Riveros, el damnificado en la primera causa, recibió una intimación por deudas contraídas con una tarjeta de crédito a su nombre.
Al hacer averiguaciones, el damnificado descubrió que Sosa Robledo obtuvo esa tarjeta utilizando su DNI y documentación apócrifa a su nombre. Además, se enteró que el delincuente compró un aire acondicionado a 1.350.000 pesos de un comercio céntrico de la Capital.
Por estos dos últimos hechos, Sosa Robledo fue traído a tribunales este lunes 24 de febrero. Se hizo presente junto a su defensor, el abogado César Jofré, quien llegó a un acuerdo con la ayudante fiscal Silvina Putelli de la UFI Delitos Informáticos y Estafas para el juicio abreviado. Fue así que el juez de garantías Javier Figuerola refrendó el acuerdo y lo condenó –por tercera vez- a 8 meses de prisión, pena que se computó con las anteriores y le quedó un castigo único de 4 años de cárcel.