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SUSCRIBITEEs la denuncia que el juez Roberto Montilla presentó en la Justicia Federal, que fue rechazada y pasó al fuero local. Acusaba a los policías de difundir los videos de la comisaría 4ta. El fiscal Nicolás Schiattino concluyó que no hubo delitos
Se cayó la segunda denuncia del juez Roberto Montilla por la supuesta filtración a los medios de los videos en los cuales se lo ve en la Comisaría 4ta y que tienen relación con la investigación en su contra por el supuesto favorecimiento a un detenido. Esa denuncia, que primero se presentó en la Justicia Federal y fue rechazada, ahora fue desestimada por un fiscal de la UFI Delitos Especiales que entendió que no hay delitos.
Todo esto es una derivación del escándalo que golpea al juez Roberto Montilla en la causa penal en la que se lo investiga por un posible favorecimiento a un detenido, identificado como José Benito Martín y alojado en la Comisaría 4ta por estafa en los primeros días de abril. Según la imputación, el magistrado realizó sucesivos llamados por celular y hasta se presentó en persona el 4 de abril último a dicha dependencia policial con el fin de disponer o convencer a los policías para que trasladaran al sospechoso a una residencia de adultos mayores.
El caso generó revuelo porque el detenido dependía del fuero Flagrancia y Montilla no tenía ninguna injerencia en esa causa. Sin embargo, él estaba muy preocupado por la situación del detenido y su traslado a otro lugar. Eso despertó sospecha en la fiscal Paula Carena, quien elevó un informe y motivó la denuncia del fiscal Iván Grassi por el sospechoso accionar del juez y la posible comisión de un delito.
De hecho, la causa se formalizó el 14 de abril y el magistrado quedó imputado de los presuntos delitos de usurpación de funciones en grado de tentativa e incumplimiento de los deberes de funcionario público en concurso ideal.
A modo de contraataque, el juez Montilla denunció al fiscal Iván Grassi por tráfico de influencias, injurias e incumplimiento en sus deberes como funcionario público. Por el contrario, la acción penal del magistrado no prosperó. Otro fiscal de la misma UFI Delitos Especiales estudió la denuncia y resolvió desestimarla.
Ahora el que desestimó otra presentación del juez fue el fiscal Nicolás Schiattino, también de la UFI Delitos Especiales. Es que Montilla había hecho una segunda denuncia en la Justicia Federal contra los policías de la Comisaría 4ta por la filtración de los videos de las cámaras de seguridad de esa dependencia y en los cuales registraron su paso por esa seccional. El magistrado pidió que investigaran a los uniformados por cohecho pasivo e incumplimiento de los deberes de funcionario público, bajo el argumento de que posiblemente recibieron dinero a cambio de divulgar esas grabaciones a los medios de comunicación. También sostuvo que el objetivo fue desprestigiarlo y afectar el debido proceso en curso, según fuentes judiciales.
En su momento, esa denuncia fue rechazada en la Justicia Federal, que se declaró incompetente, y girada a la UFI Delitos Especial. Fue ahí que tomó intervención el fiscal Schiattino, quien este lunes resolvió desestimar esta segunda presentación del juez Montilla. El representante del Ministerio Público Fiscal analizó la denuncia y concluyó en primer término que los hechos denunciados son de competencia de la Justicia ordinaria y federal.
Por otro lado, sostuvo que la presentación del magistrado no tiene sustento. En su resolución, señaló que los registros divulgados provienen de cámaras públicas ubicadas en espacios públicos, que las imágenes –en las que aparece el juez- no afectan la dignidad, intimidad ni honor del denunciante y que la publicación a través de los medios son hechos de interés público vinculado a la función pública de un juez.
También expresó que la difusión mediática es parte del derecho constitucional a la libertad de expresión y de prensa y que el derecho de resguardar las fuentes o el secreto profesional está garantizado por la Constitución Argentina. Esto porque el juez pedía citar a declarar a los dueños de los medios periodísticos que difundieron las imágenes, siendo que él mismo había hecho su descargo por los mismos portales.
Con todos estos argumentos, fiscal Schiattino arribó a la conclusión de que no hay pruebas ni el más mínimo indicio de un posible delito por parte de los policías u otra autoridad y que la denuncia del magistrado se basa en meras especulaciones subjetiva.