Denise Robles Bonade y su pareja, Rubén Martín González terminaron presos este viernes luego de que se acumulen 40 denuncias contra ellos, por haber estafado a familias con el sueño de la casa propia, a través de su constructora Anhelo Desarrollos. La particularidad, esta vez, fue que a la mujer la tuvieron que ir a buscar al hospital para meterla presa.
Cabe destacar que Robles Bonade había sido ingresada al área de psiquiatría del Hospital Marcial Quiroga, el pasado 15 de marzo. Es que cuando empezaron a salir denuncias públicas en su contra, la empresaria entró en un estado depresivo y, voluntariamente, decidió ingresarse en el nosocomio de Rivadavia. Sin embargo, horas antes de que le den el alta, le cayó la Policía se la llevó presa, explicaron fuentes judiciales a Tiempo de San Juan.
Ahora, tanto Robles Bonade como Martín González, están alojados en la Central de Policía, a la espera de la primera audiencia en su contra por el delito de estafa, que sería este lunes. Los dos están acusados de haber recibido dinero por departamentos que nunca se entregaron y de haber engañado a otros de sus clientes con inversiones financieras en dólares.
La investigación del caso está a cargo del fiscal de la UFI Delitos Informáticos y Estafas, Guillermo Heredia, y la ayudante fiscal Gabriela Blanco.
Una de las supuestas damnificadas es una familia de apellido Aubone, quien afirmó que Robles Bonade la embaucó con más de 37 millones de pesos. Los Aubone firmaron un contrato en 2024 con la empresaria por la venta de un departamento en calle Entre Ríos, en Concepción, y le entregaron un auto 0 km valuado en 26 millones de pesos, además de 6 millones y siete pagos de 500 mil pesos –de las 12 cuotas-, según la denuncia.