El ministro de Economía, Luis Caputo, celebró este viernes que el poder adquisitivo del salario medio privado del sector registrado, en enero de 2025, es el más elevado de los últimos cinco años, según los datos oficiales citados por el funcionario.
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SUSCRIBITEEl ministro de Economía publicó un posteo en X con los datos del SIPA correspondientes a enero pasado que arrojan una suba de ese ingreso de 5% desde que asumió Javier Milei
El ministro de Economía, Luis Caputo, celebró este viernes que el poder adquisitivo del salario medio privado del sector registrado, en enero de 2025, es el más elevado de los últimos cinco años, según los datos oficiales citados por el funcionario.
“El salario real promedio del empleo registrado privado (SIPA) se incrementó 1,6% m/m en enero. Un 5% por encima del nivel de noviembre de 2023″, escribió Caputo en su cuenta oficial de X. Ese resultado implica que el poder adquisitivo superó a los niveles en los que había asumido el presidente Javier Milei
“El poder adquisitivo del salario medio en enero de 2025 es el más elevado de los últimos cinco años”, celebró el ministro de Economía.
Los ingresos de los trabajadores asalariados terminaron el 2024 con un ajuste promedio del 145,5%, un valor que superó por 27,7 puntos porcentuales a la inflación de ese período (117,8%), según un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Los salarios que mayor aumento tuvieron durante el 2024 fueron los de los trabajadores informales, que registraron un incremento nominal del 196,7%. Sin embargo, se debe tener en cuenta que los empleados en negro tuvieron un 2023 particularmente malo, en el que quedaron casi 100 puntos por debajo del IPC de ese año. Es decir que aún no compensan la pérdida de poder adquisitivo sufrida en el año anterior.
En lo que respecta a los trabajadores formales, el mejor resultado lo tuvieron los asalariados del sector privado registrado, con un ajuste medio del 147,5% (29,7 puntos porcentuales por arriba de la inflación de 2024).
Por su parte, los trabajadores del sector público tuvieron un aumento nominal promedio del 119,3% en el año. Si bien les alcanzó para compensar el avance de la inflación del 2024, no tuvieron un ajuste tan marcado como para contrarrestar la pérdida de poder adquisitivo sufrida el año anterior, principalmente luego de la devaluación de diciembre de 2023, que se registró a pocos días de haber asumido el gobierno de Javier Milei.
En lo que respecta puntualmente a diciembre, los datos publicados por el organismo de estadísticas indican que los asalariados tuvieron un aumento nominal promedio del 3,1%, contra un índice de Precios al Consumidor (IPC) del 2,7%. Una vez más, los que mayor diferencia obtuvieron fueron los trabajadores del sector privado no registrado (6,8%), seguidos los empleados del sector privado formal (2,8%) y los del sector público (1,7%). Estos últimos fueron los únicos que perdieron contra la inflación en el último mes del año.
Como los números lo demuestran, en 2024 los salarios lograron superar a la inflación general y recuperar parte del poder adquisitivo perdido en los años anteriores, pero aún queda mucho por crecer para compensar el avance de los precios en los últimos años.
En vistas a 2025, los economistas esperan que la recuperación siga su curso, pero de forma lenta. Jorge Colina, de Idesa, sostuvo que la clave para la recuperación salarial está en mantener la inflación bajo control. “El salario en 2025 va a ser mejor que en 2023 y 2024, pero nos vamos a colocar en un nivel similar al de 2022″, explicó el economista, quien también resaltó que la recuperación será desigual entre sectores. Según Colina, los servicios vinculados al agro, la energía y la minería se perfilan como los grandes ganadores, ya que son sectores con alta productividad y competitividad. Sin embargo, señaló que “el problema es que estos sectores emplean a una porción muy pequeña de la población activa”.
En cambio, los sectores urbanos, como la construcción, la industria y los servicios, mostrarán una recuperación más lenta. Este panorama refleja las dificultades estructurales de estos rubros para adaptarse a un contexto económico que aún enfrenta limitaciones en términos de inversión y competitividad.
Nuria Susmel, economista de FIEL, comparte la visión de que 2025 será un año de recuperación, aunque con limitaciones. “Casi todos los salarios formales vienen recuperando, y creo que va a seguir así”, aseguró. Sin embargo, advirtió que esta mejora no necesariamente implica una ganancia real, ya que el poder adquisitivo ha sufrido una pérdida significativa en los últimos años.
Según Susmel, es probable que los salarios formales alcancen niveles similares a los de 2022, pero esto aún está lejos de compensar el deterioro de largo plazo. A pesar de ello, la economista consideró que la recuperación del nivel de actividad es una señal positiva, ya que puede impulsar el empleo y los ingresos en el mediano plazo.
FUENTE: Infobae