La cadena de hamburguesas veganas Neat Burger, impulsada por el piloto de Fórmula 1 Lewis Hamilton y el actor Leonardo Di Caprio, ha cesado definitivamente sus operaciones en el Reino Unido luego de seis años de actividad marcados por dificultades económicas. Fundada en 2019 con el objetivo de ofrecer alternativas de comida rápida a base de vegetales, el proyecto no logró consolidarse y registró pérdidas millonarias que terminaron forzando su cierre, según informó el diario británico The Sun.
La empresa nació con la promesa de revolucionar la oferta de comida rápida saludable. Respaldada por Hamilton, vegano desde 2017, y por Di Caprio, defensor de la sostenibilidad ambiental, la marca se presentó como una alternativa ética y sustentable a las cadenas tradicionales. “Creo que necesitamos una opción más saludable en las calles principales, con un sabor increíble y que ofrezca algo emocionante a quienes desean dejar de comer carne de vez en cuando”, dijo Hamilton durante el lanzamiento de la cadena en 2019.
La expansión inicial fue rápida. La marca llegó a operar hasta ocho restaurantes en Londres, además de locales en Milán y Nueva York. Su propuesta se centraba en ofrecer productos “cien por cien vegetales”, incluyendo hamburguesas, nuggets y batidos elaborados sin ingredientes de origen animal.
A pesar de la recepción positiva inicial, no logró sostener su modelo de negocio. En 2022, la empresa reportó pérdidas de 7,9 millones de libras esterlinas (equivalentes a más de 10 millones de dólares), un aumento significativo respecto al déficit de 3,2 millones registrado el año anterior, según específico el periódico The Sun. Ese mismo año, la compañía cerró varias de sus sucursales en Londres y puso fin a su experiencia en el mercado neoyorquino.
Un comunicado de la empresa emitido entonces intentó justificar la decisión como parte de una reestructuración: “Estamos concentrando nuestros esfuerzos en nuestros restaurantes con mejor rendimiento; creemos que a veces es necesario dar un paso atrás para dar un salto más grande hacia adelante”.
Sin embargo, esa estrategia no logró revertir la tendencia negativa. En 2025, sólo quedaban dos locales en el Reino Unido, ambos cerrados esta semana. “No tenemos más comentarios por el momento, salvo confirmar que la empresa ha tomado la difícil decisión de cerrar sus restaurantes en el Reino Unido”, afirmó un portavoz de la empresa. Se estima que unas 150 personas perderán sus puestos de trabajo como consecuencia del cierre. El último posteo en sus redes sociales fue el pasado 10 de abril.
Además de los problemas financieros, la cadena enfrentó obstáculos operativos. En 2023, la sucursal ubicada en Camden, al norte de Londres, recibió una calificación de higiene de dos sobre cinco tras una inspección de sanidad, aunque esta evaluación fue revertida posteriormente tras mejoras implementadas por la gerencia.
El aumento de los costos operativos en ciudades como Londres y Nueva York, sumado a un contexto económico marcado por la inflación y la caída del consumo, afectó severamente a la industria gastronómica, en especial a emprendimientos que no alcanzaron escala suficiente.
El cierre también marca un revés en los esfuerzos de sus fundadores por conectar sus convicciones personales con un emprendimiento de impacto. Hamilton ha sido una figura activa en la promoción de estilos de vida veganos como una forma de reducir el sufrimiento animal y mitigar el cambio climático. Di Caprio, por su parte, ha invertido en distintas iniciativas ambientales y sostiene una dieta vegetariana flexible como forma de disminuir su huella de carbono.
Ambos aportaron visibilidad al proyecto, pero la popularidad mediática no logró traducirse en sustentabilidad financiera. “Fue una idea noble con buenas intenciones, pero el mercado de comida rápida a base de plantas sigue siendo complejo y requiere más que buenos propósitos para sobrevivir”, apuntó el analista de consumo alimentario Tim Lang, en declaraciones al Evening Standard.
El cierre de la cadena ocurre en un momento personal y profesional complicado para Lewis Hamilton. En el reciente Gran Premio de Arabia Saudita, el piloto británico —quien esta temporada se incorporó a Ferrari— finalizó séptimo y mostró su frustración con el rendimiento del coche: “No hubo ni un segundo en el que me sintiera cómodo durante la carrera”, declaró a los medios.
FUENTE: Infobae