En las elecciones generales celebradas este domingo en Alemania, la coalición conservadora formada por la Unión Cristianodemócrata (CDU) y la Unión Socialcristiana (CSU) resultó ser la más votada, obteniendo alrededor del 28,5% de los votos, según los sondeos de boca de urna difundidos por las cadenas públicas ZDF y ARD.
Con este resultado, Friedrich Merz, el candidato conservador a la cancillería, expresó su intención de formar gobierno "lo más rápido posible", subrayando que el mundo exterior no espera largas negociaciones de coalición. Merz destacó la necesidad de ser operativos para abordar los desafíos internos y recuperar la presencia de Alemania en Europa.
En segundo lugar se ubicó la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), que logró un 20,5% de los votos, casi duplicando su apoyo respecto a las elecciones de 2021. Alice Weidel, líder de la AfD, celebró el "resultado histórico" y se mostró dispuesta a formar parte de una coalición con los conservadores, aunque Merz descartó esta posibilidad durante la campaña.
El Partido Socialdemócrata (SPD) del actual canciller Olaf Scholz se situó en la tercera posición con entre un 16% y un 16,5%. Los Verdes alcanzaron el cuarto lugar con un 12%, y La Izquierda (Linke) se ubicó en el quinto puesto con un 8,5%. El SPD experimentó una caída significativa en comparación con los comicios anteriores, perdiendo entre 9,3 y 9,7 puntos porcentuales.
Una de las grandes incógnitas sigue siendo la situación del Partido Liberal (FDP) y la Alianza Sahra Wagenknecht (BSW), ambos partidos luchando por superar el umbral del 5% necesario para entrar en el Bundestag. Según los sondeos, el FDP obtuvo entre un 4,9% y un 5%, mientras que el BSW logró entre un 4,7% y un 5%.
Con una participación electoral del 83%, la más alta desde la reunificación, la AfD alcanzó un resultado histórico al convertirse en la segunda fuerza política del país, un logro sin precedentes para un partido de extrema derecha en una elección federal desde la posguerra. Weidel celebró el resultado, asegurando que su partido había "duplicado su resultado" frente a los intentos de reducir su apoyo.
Ahora, la atención se centra en si el FDP y el BSW lograron superar el umbral del 5%, ya que esto definirá las posibilidades de coalición para Merz. De acuerdo con los sondeos, una gran coalición entre conservadores y socialdemócratas podría sumar 327 escaños, lo que representaría una mayoría en el Bundestag. Sin embargo, si ambos partidos no logran entrar, podría ser necesario formar una coalición tripartita.