Francisco murió este Lunes de Pascua a los 88 años en la Casa Santa Marta. El Domingo de Resurrección dio la bendición 'Urbi et orbi'. Durante los últimos dos meses sufrió numerosas complicaciones respiratorias. Una de sus voluntades era la de no ser enterrado en San Pedro.
A primera hora de este Lunes de Pascua, el cardenal Kevin Farrell, camarlengo del Vaticano, confirmaba la muerte del Papa Francisco. El Pontífice falleció a los 88 años en la Casa Santa Marta. Este Domingo de Ramos acudió a la misa en San Pedro donde dio la bendición 'Urbi et orbi'. Se dejó ver sin la cánula de oxígeno que solía llevar desde su ingreso hospitalario por las complicaciones respiratorias que llevaba meses sufriendo.
Tras su muerte, la Iglesia se encuentra en sede vacante, lo que significa que comienzan los preparativos para elegir al nuevo Papa en el cónclave. Antes de ello, tendrá lugar el funeral de Francisco, un acontecimiento que históricamente ha estado rodeado de una gran liturgia. El Santo Padre se encargó durante su papado de simplificar parte de la pomposidad de la Iglesia y eso también afectará a su entierro.
Francisco expresó en vida su intención de no ser sepultado en la solemne basílica de San Pedro de Ciudad del Vaticano como sus predecesores. Él, siguiendo con la promulgación de su humildad, dejó clara su intención de ser enterrado en la basílica romana de Santa María La Mayor, en la que se dejaba ver con frecuencia.
"Es mi gran devoción", llegó a reconocer en algunas entrevistas en referencia a dicho templo. No solo dijo dónde quería ser enterrado, también indicó el punto exacto en el que guardar sepultura. Francisco, de acuerdo a su deseo, será enterrado en una sencilla capilla en la que, hasta ahora, se guardaban candelabros en la nave izquierda del templo, junto a dos confesionarios.
No se trata del primer Papa enterrado fuera de San Pedro. De hecho, en la propia Santa María La Mayor hay otros siete Pontífices sepultados. Sin embargo, el vínculo de Francisco con dicho templo es realmente fuerte, pues acudía a él a rezar antes de realizar cada uno de sus viajes papales.
La Basílica de Santa María La Mayor se encuentra en la cima del monte Esquilino, en Roma, donde se erigió hace 16 siglos, y tiene el título de Papal. Es una de las cuatro basílicas con dicho honor en la capital italiana. En ella se encuentra la talla de Santa María di Maggiore de Roma, considerada la salvadora del pueblo romano.
Según la tradición eclesiástica, esta virgen se apareció en los sueños del patricio Juan y del Papa Liberio. En ellos les pedía la construcción de un templo en su honor. El lugar para erigirlo se lo hizo saber mediante una gran nevada milagrosa que se conmemora cada 5 de agosto con el lanzamiento de pétalos blancos desde el techo.
Aunque será enterrado en este espacio, el funeral sí tendrá lugar en la plaza de San Pedro en la fecha que se elija en una reunión plenaria de cardenales. Será, por deseo expreso de Francisco, siguiendo un rito sencillo "pegado a la tierra" y sin seguir antiguas tradiciones medievales que se han conservado en exequias anteriores. Después será enterrado en Santa María La Mayor. Una vez se le dé sepultura, se realizarán misas durante nueve días consecutivos, periodo en el que los cardenales fijarán una fecha para iniciar el cónclave del que saldrá su sucesor.
FUENTE: Euro News