“Es una buena noticia”, fue la frase que usaron al unísono los empresarios constructores Miguel Gili y Julián Rins, sobre el acuerdo que celebró el gobernador Marcelo Orrego con el Jefe de Gabinete de la Casa Rosada, Guillermo Francos, para destrabar cinco obras viales e hídricas muy importantes para la provincia.
“Debido al desfinanciamiento y la parálisis que estamos atravesando a nivel nacional, el alivio vendrá con el retorno efectivo a la actividad”, dijo Gili, presidente de la Cámara de Empresarios de la Construcción (CAEMCO).
Por su parte, Rins desde la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO) lo consideró como “un avance importante en la política de obras públicas, que el gobierno provincial haya firmado este convenio con Nación”. Sostuvo que es “una buena noticia porque le da un marco de certeza de cómo va a funcionar la obra pública a partir de ahora. Así que estamos conformes con el avance”.
Acuerdo por obra pública
Tras una reunión en la Nación, la provincia logró destrabar y reactivar la construcción de un tramo de la Ruta 40 Sur, entre San Juan y Mendoza, las distintas etapas de la Planta de Saneamiento de Rawson y el Acueducto Gran Tulum. Tambien dos obras hídricas en departamentos alejados como son el Acueducto El Tambillo, en Iglesia; y la tercera Etapa del Sistema Cloacal de Jáchal.
Plazos y actividad
En la CAEMCO estimaron que estas obras se estarán retomando en unos 45 a 60 días, “por la inercia que imprimen las cuestiones administrativas y legales sumada a la operativa propia de la industria”.
En ese sentido, Gili sostuvo que esta noticia se suma a la voluntad política del gobierno para sostener obras de carácter provincial “con lo cual se genera un futuro mediato muy promisorio”. Además, indicó que se espera reducir a mínimos la diferencia interanual de ocupación de mano de obra hacia al último trimestre de 2024.
“Al ser obra de ingeniería, los proyectos de infraestructura no se caracterizan por un gran impacto en la ocupación de personal, de todas maneras, en la situación actual, provocarán una reducción en ese déficit con la incorporación de cerca de 500 a 700 operarios y el consecuente impacto en la actividad anexa de la cual, la construcción, es inmediata motorizadora”, dijo el empresario.
Por su parte, Rins evitó pronunciarse respecto a plazos y empleos: “todos esos datos creo que debe evaluarlos el ministro (Perea), no tengo claro cuál es el cronograma de inicio de obras, porque una parte de la inversión la tiene que hacer provincia, así que depende de los recursos provinciales”, sostuvo.