Marcelo Gallardo, director técnico de River, hizo una fuerte autocrítica luego de la durísima derrota por 3-0 contra Atlético Mineiro, en Belo Horizonte, por la ida de las semifinales en la Copa Libertadores: reconoció que "no salió absolutamente nada" y aseguró que deberán hacer un "partido perfecto" para ir por la épica hazaña en la revancha en el Monumental.
"Creo que no salió absolutamente nada de lo que practicamos o intentamos desarrollar durante la previa del partido. Cuando no fluye, es difícil hacer un análisis. Nada fluyó. Nada se manifestó de lo que habíamos pensado. Fuimos un equipo que sufrió en todas las líneas. Cuando un equipo sufre en todas las líneas, con un rival de jerarquía... Bueno, la pagás caro como la pagamos hoy. Eso el rival lo vio y lo aprovechó. No hay mucho análisis", fue lo primero que dijo el técnico en conferencia de prensa, sin vueltas.
Luego, explicó por qué decidió jugar con línea de cinco defensores y la razón de la sorpresiva inclusión de Nicolás Fonseca como mediocampista central: "Tratar de jugar mano a mano con los extremos de ellos por fuera. Por dentro jugaban con tres puntas. También , tratar de tomar hombre, más Nico Fonseca que iba a ser el hombre libre para tener la posibilidad de hacer dos con uno, si era necesario. Después, que fluyera. No fluyó. Ellos con pelotazos largos nos complicaron. Sabíamos que podía ser así. Hubo desacoples del equipo y llegaron los goles. Fueron muy fáciles que nos hicieron. Es la sensación que te da. No fuimos el equipo duro que tendríamos que haber sido para resistir los ataques de ellos y dañarlos cuando recuperábamos la pelota".