Si bien todavía no tiene certezas sobre el rival que le tocará enfrentar inicialmente, Boca ya conoce el camino que deberá recorrer hacia la fase de grupos de la Copa Libertadores. Ese sendero, no extremadamente exigente, al menos a priori, quedó trazado este jueves, cuando se sortearon los cruces y las llaves de las fases preliminares del principal certamen de clubes de América del Sur.
El sorteo, que se llevó a cabo en la sede que la Confederación Sudamericana de Fútbol posee en Luque (Paraguay), dejó al equipo dirigido por Fernando Gago con una pizca de incertidumbre, ya que es uno de los tres conjuntos que ingresarán directamente a la segunda fase preliminar que todavía no tiene un rival asignado. Esto es porque su adversario surgirá de uno de los tres cruces de la primera fase.
Este viernes, desde la Conmebol se dio a conocer el calendario de la fase previa y mientras espera por su rival Boca ya sabe la fecha de sus cruces en la fase 2. El equipo de Fernando Gago debutará como visitante, en Asunción o Lima, el martes 18 de febrero a las 21.30 horas; una semana después, el martes 25, buscará festejar el pasaje a la fase 3 como local, en la Bombonera, a la misma hora.
Una vez que se resuelva la fase 2, la casa madre del fútbol sudamericano programará los choques de la fase 3, la última ronda preliminar en que los ganadores accederán a los grupos y los perdedores a la Copa Sudamericana. En teoría, esa última fase se jugará en las dos semanas subsiguientes, en marzo.
La primera fase de la Copa Libertadores 2025 se llevará a cabo en las semanas del 5 y del 12 de febrero, y allí ElNacional de Ecuador se medirá con un conjunto boliviano (quedará definido este fin de semana, tras la última fecha del Torneo Clausura de ese país) y Monagas de Venezuela chocará con Defensor Sporting de Uruguay. Pero la atención de los simpatizantes de Boca se orientará al duelo que protagonizarán Nacional de Paraguay y Alianza Lima de Perú, ya que el vencedor será su adversario en la segunda fase.
Ninguno de estos dos equipos ha tenido una temporada 2024 brillante. Nacional terminó 10° entre 12 participantes en el Torneo Apertura paraguayo, que ganó Libertad, y quinto en el Clausura, que quedó en poder de Olimpia. Así, terminó octavo en la tabla anual, una posición que no le hubiese permitido acceder a competencia subcontinental alguna, pero ingresó a la primera fase de la Libertadores por haber sido el subcampeón de la Copa Paraguay, ya que el campeón, Libertad, ya se había asegurado su lugar en la fase de grupos como ganador del Apertura.
En 2024, el Tricolor también disputó estas fases iniciales de la Libertadores. En la primera eliminó a Aucas de Ecuador y en la segunda, a Atlético Nacional de Medellín, pero en la tercera fue derrotado por penales por Palestino de Chile. Eso le permitió, al menos, competir en la Copa Sudamericana: terminó último en el grupo F, que compartió con Corinthians, Racing de Montevideo y Argentinos Juniors.
Nacional es dirigido por el entrerriano Víctor Bernay desde abril y en la temporada del balompié paraguayo que terminó hace dos semanas tuvo en su plantel a seis futbolistas argentinos: los defensores Sergio Ojeda, Juan Luis Alfaro y Juan Monteagudo; los mediocampistas Facundo Velazco y Juan Fernando Alfaro, y el delantero Ignacio Bailone (Ojeda y Bailone ya se desvincularon).
Alianza Lima, el segundo equipo más ganador en la historia del fútbol peruano (solo lo supera Universitario), terminó cuarto en la liga de su país, detrás del campeón Universitario, Sporting Cristal y Melgar. Ese modesto cuarto puesto le dio la chance de competir en la primera ronda de la Libertadores.
El elenco blanquiazul tiene un récord que no muchos quisieran ostentar: participó en la fase de grupos de la Copa Libertadores en seis de las últimas siete ediciones, aunque en todas terminó último en su zona y solo ganó uno de los 36 partidos que disputó (empató cinco y perdió 30).
Alianza afrontará este reto con un entrenador argentino en su banco: Néstor Gorosito. Pipo asumió la semana pasada en reemplazo de otro compatriota, Mariano Soso, quien había renunciado en noviembre para sumarse a Newell's. En los próximos días comenzará a delinear el plantel, que hasta estos días estuvo integrado por cinco argentinos (el defensor Juan Pablo Freytes, los mediocampistas Adrián Arregui, Catriel Cabellos y Gonzalo Aguirre, y el delantero Hernán Barcos) y también cuenta con dos símbolos del fútbol peruano: Carlos Zambrano y Paolo Guerrero.
El ganador de ese choque entre Nacional y Alianza Lima será el primer escollo de Boca en su camino a la fase de grupos. El primer partido de este cruce de la segunda fase se disputará durante la semana del 19 de febrero en el estadio del vencedor del duelo de la primera ronda, mientras que el desquite será una semana más tarde en la Bombonera.
Si el Xeneize, ganador de seis ediciones de la Copa Libertadores, sale airoso de ese cruce, deberá jugar su suerte en la tercera y última ronda preliminar contra el ganador de la llave que protagonizarán Deportes Iquique de Chile e Independiente Santa Fe de Bogotá.
El conjunto de la región de Tarapacá, en el extremo norte chileno, competirá por tercera vez en la Copa Libertadores (lo hizo en 2013 y 2017), a la que accedió por haber finalizado en el tercer puesto de la liga de su país. En tanto, Independiente Santa Fe se metió en estas rondas preliminares del torneo subcontinental por haber terminado segundo en la tabla anual de la primera división colombiana.
Los cruces de la tercera fase, que serán cuatro, se jugarán las semanas del 5 y 12 de marzo. En caso de acceder a esa instancia, Boca también definiría su duelo como local. Los cuatro ganadores de esta ronda accederán a la fase de grupos, mientras que los perdedores ingresarán a la fase de grupos de la Copa Sudamericana.
FUENTE: Clarín