El deporte motor le corre por las venas. Fabián Flaqué, su padre, fue uno de los sanjuaninos históricos del TC2000 y ella no se achica en el ambiente fierrero. Arrancó hace un año y dice que los genes le sientan bien para conseguir todo lo que se proponga. Le sacó el polvo al karting que dejó su hermana, se puso el traje de piloto y ya debutó en el campeonato mendocino. ‘Bebi’, la hija e’ tigre que sueña acelerar en las grandes pistas.
“Nunca pensé que me iba a gustar tanto la velocidad y el estar arriba de un karting. Aspiro a un Mundial, Europa, Chile… Mientras mis papás estén al lado, siempre voy a llegar a donde yo quiera”, relató la pequeña Delfina Flaqué (12) a Tiempo de San Juan.
Su historia con el karting estuvo destinado. Si bien antes se había negado al deporte motor, un día como cualquiera decidió subirse al karting para probar y nunca más se bajó: “Mi hermana Constanza era la que realmente competía y un día se levantó y no le gustó más. Así fue como una mañana en la que ella se había ido a la casa de su amiga, el karting estaba ahí… Ahí aparece mi papá y me dice 'acompañame a andar en karting, probá, ponete el buzo, casco y subite'; y la verdad que me encantó. Me dio tanta emoción estar arriba, porque nunca pensé que iba tenerle amor a esto y sentir pasión por los autos”, remarcó.
No hace mucho eligió empezar con la aventura de las carreras y aunque se siente acompañada y quiere seguir los pasos de su padre, afirma que acelera en las curvas de las opiniones.
“Algunas compañeras no podían creerlo, decían que como una chica puede ser piloto, porque según ellas, los hombres solamente pueden serlo y la verdad, les dije que todo es posible, que aunque sea mujer puedo hasta incluso ser mejor que algunos chicos que andan hace tiempo en Karting”, aseguró la pequeña de los Flaqué que va al frente y tiene el ojo puesto en su siguiente objetivo.
“Es un deporte que me apasiona y divierte mucho. Cada día aprendo un poco más de esto. Mi papá se convenció de que verdaderamente me gustaba y decidió no vender el karting. Él (su padre) siempre está dándome consejos para mejorar, cuando terminan las carreras y ya no queda nadie, salimos a la pista y me explica las cosas que tengo que hacer para andar bien y que cada día salga mejor".
Hace poco más de un año que se subió al karting y el pasado fin de semana debutó en su primera carrera en el campeonato mendocino. Sí bien el resultado no fue el esperado, confía en el proceso y se pone un objetivo a futuro: "Me encantaría ser piloto profesional. En mi debut me sentí segura y sentí que iba a poder contra chicos que corren hace más de tres años", aseguro la estudiante del Colegio Santo Tomás de Aquino.
FABIÁN FLAQUÉ: PAPÁ, CONSEJERO Y GUÍA DE LA PEQUEÑA DELFI
"Esto le encanta, la veo con ganas y enchufada desde que me dijo que quería empezar a andar en serio. Empezó a entrenar en el gimnasio conmigo. Delfi maneja muy bien, por supuesto que le falta muchísima experiencia y saber entender algunas cosas para ir un poco más rápido. Para el poco tiempo que lleva andando lo lleva bastante bien, quiero que se divierta y que lo disfrute. Siempre va a tener mi apoyo", aseguró Fabián.
COLAPINTO, SU EJEMPLO
Delfi tiene dos referentes muy bien marcados y no le tiembla el pulso cuando tiene que hablar de uno de sus ídolos: Franco Colapinto, el piloto actual piloto de Williams.
“Es un ejemplo a seguir sin duda. Es humilde y lo sigo desde siempre. Veo sus carreras y me prendo también a las carreras del automovilismo. Cuando vamos a la casa de mi abuela los domingos, lo primero que hago es poner la carrera en la tele”.