Al traspasar Av. Benavidez, yendo de Sur a Norte, se empieza a notar en la respiración el aroma a carnaval. Poco más de dos semanas faltan para que Chimbas vuelva a disfrutar de su máxima fiesta y el hecho de no haberla podido tener –por razones económicas- en el 2024 genera que la expectativa sea aún mayor.
La presentación oficial de este encuentro en honor al Rey Momo se realizó este miércoles con la presencia de la intendenta Daniela Rodríguez y algunos coloridos y rítmicos bailarines y pasistas junto a la plaza departamental. Al mismo tiempo, en el corsódromo chimbero, ubicado en el lateral sur del Costanera Complejo Ferial, empleados municipales se encontraban hermoseando a la arteria anfitriona.
Debidamente protegidos de un sol que ejercía de testigo, los trabajadores llevaban adelantes distintas tareas que a la postre brindarán más comodidad y seguridad durante las tres noches que durará la 26ª edición del Carnaval de Chimbas.
La cuadrilla más concurrida se encontraba construyendo veredas en costado este de calle Salta, a metros precisamente de la rotonda que conecta con uno de los accesos al corsódromo. En paralelo, y provistos de anchos escobillones, otros operarios iban despejando piedras y otros residuos de la banquina.
Ya dentro del espacio del Costanera Predio Ferial, en el cuadrante sureste para más precisión, otros empleados terminaban de colocar las inconfundibles mangueras del riego por goteo. Todo esto sucedía mientras camiones municipales iban y venían transportando distintas cargas que permitirán un mejor estado del corazón del carnaval chimbero y provincial.
El 28 de febrero, día que arranca la movida carnavalesca, todo estará terminado para que la postal se complete con tribunales tubulares, pantallas gigantes y otras estructuras. Desde ahí en adelante, color, magia y mucho ritmo.